Primeros auxilios contra la mordedura de perros
Saber cómo actuar ante una mordedura de perro es fundamental para reducir el riesgo de infecciones, complicaciones y secuelas. Los primeros auxilios inmediatos pueden marcar la diferencia en la recuperación de la persona afectada.
Evaluación de la situación y seguridad
Lo primero es asegurarse de que la situación sea segura para prestar ayuda. Si el perro sigue cerca y muestra agresividad, aléjate y busca ayuda para controlar al animal. No intentes intervenir si existe riesgo de una nueva agresión. Una vez que el entorno es seguro, acércate a la persona lesionada.


Control del sangrado
Si la mordedura está sangrando, utiliza una gasa limpia, un paño o incluso la mano (si no hay otra opción) para ejercer presión directa sobre la herida. Esto ayuda a detener o disminuir el sangrado. Si la sangre empapa la gasa, coloca otra encima sin retirar la anterior y sigue presionando.
Limpieza de la herida
Una vez controlado el sangrado, lava la herida con abundante agua y jabón durante varios minutos. Esto ayuda a eliminar bacterias y reduce el riesgo de infección. No uses cepillos ni frotes con fuerza, ya que podrías dañar más los tejidos. Si es posible, deja correr el agua sobre la herida para arrastrar la suciedad y los gérmenes.

Desinfección y protección

Después de lavar la herida, aplica un antiséptico (como yodo povidona o clorhexidina) para desinfectar la zona. Luego, cubre la herida con una gasa estéril o un vendaje limpio, evitando apretar demasiado para no dificultar la circulación sanguínea.

Atención médica inmediata

Todas las mordeduras de perro, incluso las que parecen leves, deben ser valoradas por un profesional de la salud. Es fundamental acudir al médico lo antes posible, ya que las mordeduras pueden causar infecciones graves, daño a nervios, tendones o huesos, y requieren tratamiento específico. El médico evaluará la necesidad de suturas, antibióticos, vacunas contra el tétanos o la rabia, y seguimiento especializado.
Consideraciones adicionales
Recoge información sobre el perro que causó la mordedura: si es conocido, si tiene dueño, si está vacunado y si muestra signos de enfermedad. Esta información será útil para el personal médico y las autoridades sanitarias. Si la mordedura es en la cara, el cuello, las manos, los pies o es profunda, la atención médica debe ser aún más urgente, ya que estas zonas son más propensas a complicaciones.

Prevención de infecciones y seguimiento

Sigue las indicaciones médicas para el cuidado de la herida en casa: cambia el vendaje según lo recomendado, mantén la zona limpia y observa signos de infección como enrojecimiento, hinchazón, calor, pus o fiebre. Si aparecen estos síntomas, regresa al médico de inmediato.